
La filariosis canina es una enfermedad muy peligrosa si no es tratada como es debido. Se trata de una enfermedad parasitaria en la que el parásito es un diminuto gusano conocido como Dirofilaria immitis.
Este parásito hace que el perro enferme, introduciéndose en el corazón o en los vasos sanguíneos del animal. La filariosis es fácilmente contagiosa, puede transmitirse de una manera muy sencilla… si un mosquito porta la enfermedad desde otro perro y pica al nuestro podría contagiarlo.
Es muy importante que esta enfermedad sea tratada. Si no tratamos correctamente la filariosis canina, puede dar lugar a síntomas graves como el agotamiento, la dificultad respiratoria, las lesiones cardiacas o la falta de vitalidad.
Debemos preocuparnos por nuestro perro y procurar que en todas las revisiones anuales, nuestro amigo sea sometido a una prueba diagnóstica.
Por suerte, hoy en día los veterinarios pueden detectar la enfermedad, ofrecer un programa detallado para la prevención o tratarla si se necesita.
Escrito por Jaime Trujillo Escobedo