
Los cromosomas, encontrados en el interior del núcleo de todas las células del organismo, pueden observarse, contarse o investigarse siguiendo un procedimiento especial.
Los genes están alojados en cromómeros, los cuales componen los cromosomas y éstos se “unen” a pares en una célula, formando un solo cuerpo visible.
Durante el proceso de la fecundación (ante la fecundación de un espermatozoide al óvulo) se elimina un cromosoma procedente de cada par que contiene cada una de las células en los padres, por lo que el embrión adquirirá un 50 por ciento de genes paternos y otro 50 por ciento de genes maternos.
Con esta separación se crea un par de cromosomas nuevos, compuestos por uno simple procedente del padre y otro de la madre, lo que da origen a la célula que originará la nueva criatura (con los pares de cromosomas de sus padres y una composición intermedia o distinta).
Cada célula consta de dos tipos de cromosomas, los grandes y los pequeños.
Los primeros tienen forma de uve, y son alargados. Los segundos, con forma esférica u ovalada llegan a tener un tamaño diez veces menor al de los grandes.
El mapa cromosómico de las aves suele compararse a menudo con el de los reptiles, dado que comparten características...
- Los grandes cromosomas se sitúan en un área central, radialmente (en donde se distribuyen los cromosomas pequeños).
- El número de cromosomas varía entre 60 y 80 pares, lo que es bastante similar.
La transmisión de los genes
Al igual que los cromosomas son pares, los genes de cada uno también y ambos comparten las reglas de eliminación.
Pondré a continuación un ejemplo sencillo para mostrar el resultado de un cruzamiento por padres con caracteres de color distintos y así poder determinar los resultados de cría y el color de los pichones:
La hembra será de color naranja, con un factor azul recesivo.
El macho será de color amarillo, con un factor blanco recesivo.

Antes de comenzar deberemos tener claro el orden dominante y recesivo de cada factor.
Supongamos pues que el azul del macho es dominante, así como el amarillo y naranja de la hembra (los cuales son también equipotentes). El resultado será el blanco, que se muestra recesivo ante los demás.
Posteriormente aprenderemos a conocer la cantidad exacta de células que pueden cruzarse para combinar cromosomas y obtener como resultado pájaros de distintos colores, como azules, anaranjados o amarillos.
Escrito por Jaime Trujillo Escobedo